Tu silencio es irremediable

En algún momento se determinó en mi vida que tú no estarías más.
Que fuiste un hermoso recuerdo,
lejano ya, irrepetible.

Te marchaste
para sumar a tu silencio, ahora la distancia
Buscando en ella olvidarme
lastimarme.

Y el olvido parece vetado para nosotros
Pensando en que no te soñaría más, he pasado las noches despierto,
imaginando tu sonrisa, acechando tus recuerdos.

Pero el tiempo lo toca todo
Colmándolo de gloria
o desvaneciendo las fantasías en el aire de la tarde.

Desvaneciendo el rostro que ocultas
Aunque yo no lo quiera
Tu silencio es irremediable

Irremediables son también mi locura y el drama que construyo alrededor de mi vida
Adornándola de complejidades para salvarla.

Mi vida es caótica

Sin sentido recorro las mañanas y vigilo las noches
Tratando de encontrar una pista para mi camino
– mi camino pudiste ser tú –

Tú eres la aceleración de mis latidos en mi vida
Pero también eres un lazo.
Sin tenerte, y sin embargo anhelarte, no soy libre.

No soy libre porque diariamente mis pensamientos me abandonan por ti
Eres una pausa obligada en mis tareas
Una luz que siembra destellos en la opacidad de mi vida.

Soy ‘simple’, porque refrené mis emociones
para no sentirte tanto, por temor a desconocerte
Porque para mí la vida es todo o nada,
y no obstante, en ningún caso lo logré contigo.

Imaginé mucho. Te extrañé – aún lo hago.
Pero verdaderamente me has dicho
con tus silencios, con tus ausentes respuestas
que será imposible estar contigo.

Todas la cosas son posibles. Y tu olvido lo fue.

Anhelaba verte y reír – y luchar, amar, a ti, contigo.

Pero el silencio todo lo carcome. El silencio y la distancia
– si acaso no son uno mismo.

El tiempo, mis errores, la vida, tu lejanía han cobrado su precio.
No estás aquí.
Y podría tenerte sentada a mi lado
y ese tremendo vacío aún nos separaría.
Un vacío infranqueable que separa nuestras vidas.

Podía ver a través de tu ser, de tu corazón,
pero no alojarme en él.
Por el riesgo tuyo de ser transparente para mí.

Para mí que soy un monolito indescifrable,
frío, seco.

Tampoco puedo escribir,
no te puedo escribir más ahora.
Aunque todo lo que haya escrito, y todo lo que imaginé había escrito
llevara elementos de tu ser.
Tu sonrisa, mis marcas, tu silencio

A continuación:

Si no te tengo, no sé qué es de mí

Si no te tengo, no sé qué es de mí